jueves, 22 de julio de 2010

EL GRITO EN EL MURO

Francamente

dejaría el agobio para otro día

y no impondría el grito en el muro:

esa rutina de querer que paguen:

no la deuda externa,

sino que paguen sus delitos.

Dejaría esta cotidiana forma de perder la vida

borraría de todos los anales mi presencia

arrancaría las hojas que me registran

y no impondría el grito en el muro:

esa rutina de querer que paguen.

He vivido y he visto morir compañeros.

Aprendí a morir con aquellos que sin conocer morían.

Aprendí a querer a aquellos que sin conocer morían.

Ha pasado un mes

y estoy salpicado de sangre cicatrizada en el cemento

ha pasado un año

y aún quedan rastros de voltaje

han pasado quince años

y no estoy intacto de genocidio

han pasado sembrando

ausencias y cadáveres y prisioneros y torturas

han pasado

y han dejado manchada toda la vida

toda la historia, todo vestigio de pureza

manchado de dolor

han pasado y siguen pasando

¿se pueden amnistiar los años?

¿se puede amnistiar el territorio?

¿se pueden amnistiar los funerales?

¿se puede amnistiar la tristeza?

Sinceramente solcito renunciar a privilegios

no seré demócrata para firmar impunidad

no seré cristiano para orar impunidad

no seré ciudadano para votar impunidad

no seré realista para aceptar impunidad

(se armaron de razones para matar

se razonaron las armas para matar)

y no impondría el grito en el muro

esa rutina de querer que paguen:

no la deuda externa

sino que paguen sus delitos.


(francisco miranda)

http://www.youtube.com/watch?v=dXFaEIQ2dfM

1 comentario:

  1. "Los enemigos que matasteis están vivos, y porque estamos vivos, no hay perdón ni olvido". (Jecar Neghme).

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