Esta cordura se sujeta de un hilo
cayendo
nuestras máquinas pierden sus súper poderes
existen declaraciones proféticas
predicciones delirantes
y derrotas de conciencia.
Yo no quiero entregarme a la pesquisa de los necios
mientras cada ojo se enjuga al tiempo
del espejismo diario
de la imagen de nación benefactora
donde el himen es roto con un crucifijo
que luego es usado para firmar perdones.
Cerrado por derrumbe
el país experimento
anegado de sal enferma
cuando la sarna se defiende a sí misma
cargada de muerte
de vergüenza prófuga
En la capital un empresario asecha la moneda
que sus amigos habían incendiado
y la mitad del país celebrando
en nombre del asesino.
Chile demente epicentro y clímax
a mí
se me cayeron todas las palabras.
(Daniela Senn)
No hay comentarios:
Publicar un comentario